top of page

¿Hacia donde vamos?

Visión, Misión y Valores

Nuestra Vision es levantar Creyentes comprometidos que forman discípulos y que sirven con gozo mientras se preparan para la venida de Cristo.

​

Nuestra Misión - Lo que hacemos:

  1. Llevar a los creyentes a tener una relación personal y significativa con Jesucristo como Salvador y como Señor.

  2. Formar discípulos de Cristo bien fundamentados en la Palabra de Dios y llenos del Espíritu Santo, que sean vencedores.

  3. Edificar familias extraordinarias, con matrimonios fuertes y con hijos que amen y sirvan a Dios.

  4. Ser una iglesia que cumpla el sueño de Cristo cuando dijo: “Yo edificaré mi iglesia…”. Donde el amor del Padre, la gracia de Cristo y el poder del Espíritu Santo se manifiesten.

  5. Ser una iglesia que sirve y hace una diferencia en la ciudad.

  6. Ser una iglesia que evangeliza y apoya la obra misionera en el mundo, compartiendo de gracia lo que hemos recibido por gracia.

  7. Multiplicarnos para plantar otras iglesias en el área metropolitana.

 

Valores -  Lo que deseamos que nos identifique como iglesia por medio de Cristo.

​

Nuestro deseo es que todos los miembros de La Casa de mi Padre adopten y vivan cada uno de los siguientes valores:

  • Adoración – Fuimos creados para adorar a Dios y lo hacemos con gozo y de todo corazón. Entendiendo que la adoración es mucho más que la música y el canto, es vivir agradando a Dios en todo.

  • Compromiso – Estamos comprometidos con Dios para vivir dentro de su voluntad. Estamos comprometidos a ser colaboradores de Dios en la edificación de la iglesia local.

  • Excelencia – Queremos darle a Dios lo mejor que somos y lo mejor que tenemos.

  • Generosidad – Realmente creemos que es mejor dar que recibir, por eso damos con generosidad para suplir las necesidades de la iglesia local, para apoyar a los necesitados y para apoyar las misiones.

  • Crecimiento – Sabemos que Dios quiere que muchos sean salvos, por eso hacemos labor de evangelismo y nos interesamos en los nuevos creyentes.

  • Madurez – Sabemos que Dios quiere tener hijos maduros, por eso deseamos conocer mejor la Palabra de Dios mediante la lectura y la participación en las clases de discipulado que se imparten en la iglesia local.

  • Servicio – vivimos para servir a Dios y para servirnos los unos a los otros.

  • Integridad – Procuramos actuar con integridad en nuestra vida personal, en nuestra familia, en nuestro trabajo y en nuestra iglesia.

  • Honra – Como hijos honramos a nuestros padres, como creyentes honramos a nuestras autoridades espirituales, como ciudadanos honramos a nuestras autoridades civiles y como trabajadores honramos a nuestros jefes.

bottom of page